Estudiantes de la UQ ganan premio por investigación sobre toxoplasmosis congénita
Un grupo de estudiantes de segundo semestre de Medicina y del Semillero de Investigación del Grupo de Estudio en Parasitología y Micología Molecular (GEPAMOL) de la Universidad del Quindío logró un destacado reconocimiento en el XVIII Encuentro Departamental de Semilleros de Investigación – Nodo Quindío, donde presentaron su proyecto Evaluación de la subpoblación de los linfocitos T CD4 de memoria en niños y adolescentes con toxoplasmosis congénita y su relación con variables clínicas y serológicas. Este trabajo fue reconocido como la mejor ponencia oral, con una calificación perfecta de 100/100, que además les permitió ser seleccionados para participar en el encuentro nacional de semilleros de investigación.
El equipo está conformado por los estudiantes: María Antonia Restrepo Duque, Sebastián Serna Rivera, Jocelyn Alexandra Arredondo, Juan David Fandiño, John Alex Cárdenas, Daniela Hurtado y Mariana Castro, acompañados por el estudiante de intercambio del doctorado en Ciencias de la Salud Danilo Donizete da Silva. La investigación contó con la asesoría del doctor Jorge Enrique Gómez Marín y la doctora Mónica Vargas.
Según Sebastián Serna Rivera, uno de los investigadores, la motivación surgió de una inquietud sobre las reactivaciones de lesiones oculares y rebotes serológicos en niños con toxoplasmosis congénita. “La importancia de este trabajo radica en determinar si estos niños desarrollan una respuesta adecuada de linfocitos T de memoria, lo cual podría relacionarse con el riesgo de recaídas o lesiones oculares. Esto abriría la puerta a una profilaxis inmunológica, en reemplazo de los tradicionales tratamientos con antimicrobianos, que presentan desventajas como toxicidad, costos y disponibilidad”.
El proceso de investigación consistió en la toma de muestra de sangre a los pacientes, cuyo análisis se realizó en laboratorio mediante técnicas de citometría de flujo. Con los datos recopilados, se realizó un análisis estadístico para determinar si los linfocitos T recordaban al parásito y si esa memoria inmunológica guardaba relación con el tratamiento recibido, las secuelas clínicas y las lesiones oculares.
